Ernesto CHE Guevara

Ernesto Guevara de la Serna nace el 14 de junio de 1928 en Rosario, Argentina.
En diciembre de 1947 ingresa a la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires. El 12 de junio de 1953 recibe el título de médico.

Desde 1953 viajó por Perú, Ecuador, Venezuela y Guatemala, descubriendo la miseria dominante entre las masas de Iberoamérica y la omnipresencia del imperialismo norteamericano en la región, y participando en múltiples movimientos contestatarios, experiencias que le inclinaron Su militancia izquierdista le llevó a participar en la oposición contra definitivamente a la ideología marxista.
En 1955 Ernesto Che Guevara conoció en México a Fidel Castro y a su hermano Raúl, que preparaban una expedición revolucionaria a Cuba. Guevara trabó amistad con los Castro, se unió al grupo como médico y desembarcó con ellos en Cuba en 1956. Instalada la guerrilla en Sierra Maestra, Guevara se convirtió en lugarteniente de Castro y mandó una de las dos columnas que salieron de las montañas orientales hacia el Oeste para conquistar la isla. Participó en la decisiva batalla por la toma de Santa Clara (1958) y finalmente entró en La Habana en 1959, poniendo fin a la dictadura de Batista.

El nuevo régimen revolucionario concedió a Guevara la nacionalidad cubana y le nombró jefe de la Milicia y director del Instituto de Reforma Agraria (1959), luego presidente del Banco Nacional y ministro de Economía (1960) y, finalmente, ministro de Industria (1961). Buscando un camino para la independencia real de Cuba, se esforzó por la industrialización del país, ligándolo a la ayuda de la Unión Soviética, una vez fracasado el intento de invasión de la isla por Estados Unidos y clarificado el carácter socialista de la revolución cubana (1961).
Su muerte

El 7 de noviembre de 1966 se iniciaba para el Che una nueva etapa. La Bolivia que lo había conocido en su juventud, apenas en el despertar de su conciencia revolucionaria, lo veía llegar como antes a Bolívar o a Sucre, libertador de América. Durante 11 meses, al frente de un puñado de hombres, cubanos, peruanos, bolivianos, latinoamericanos todos, surcó un pedazo de los Andes, enfrentando, venciendo las balas, el hambre, la sed, el frío, el dolor, la muerte…

En uno de los momentos decisivos de la guerrilla, cuando las dificultades intentaban dominarlos, Che reunió a sus hombres y los instó a crecerse ante la historia: “este tipo de lucha nos da la oportunidad de convertirnos en revolucionarios, el escalón más alto de la especie humana, El 9 de octubre por la mañana el gobierno de Bolivia anunció que Ernesto Guevara había muerto en combate el día anterior.
Dado que el Che se había convertido en un símbolo para los jóvenes de todo el mundo, los militares bolivianos, aconsejados por la CIA, quisieron destruir el mito revolucionario, asesinándole para después exponer su cadáver, fotografiarse con él y enterrarlo en secreto. Se salvó, sin embargo, su Diario de campaña, publicado en 1967.